martes, 18 de febrero de 2020

La batalla en 2014 entre Rafael Enrique Celis Yánez y Gabriel Jiménez Aray por 60 millones de pesos dominicanos en el Banco Peravia

El pasado mes de noviembre, el Banco Central de República Dominicana ordenó la suspensión de operaciones del Banco Peravia de Ahorro y Préstamo, con lo que oficialmente comenzaron las averiguaciones sobre las transacciones de esta institución, cuyos ejecutivos principales eran dos venezolanos, José Luis Santoro y Gabriel Jiménez Aray, que habían sido objeto de señalamientos en Venezuela por legitimación de capitales provenientes de la corrupción y del lavado de dólares, informó 6to Poder en un reportaje de investigación.

Desde 2013, en la Fiscalía del Distrito Nacional de República Dominicana reposaban dos demandas, una por parte de Carmen Magaly Gamargo de López contra los ejecutivos del Banco Peravia, Santoro, Jiménez Aray y los hermanos dominicanos Nelson, Carlos Alberto y José Serret Sugrañez. La querella era por asociación de malhechores, abuso de confianza y lavado de activos por la emisión de dos certificados de inversión, uno por $ 23.000 y otro por 400.000 pesos dominicanos.

La otra demanda fue interpuesta por Juan Carlos Urdaneta, contra Santoro y Jiménez, por la emisión de cinco certificados de inversión por un valor de $ 1. 800.022.

Según explicó el abogado Jorge Lara Castillo en el reportaje mencionado, “entre los principales ejecutivos (del banco) era costumbre captar dólares en el extranjero, pese a que como Banco de Ahorro y Préstamo este tipo de operaciones no les estaba permitido”.

A las demandas mencionadas se sumó un embargo retentivo que solicitó el empresario Rafael Enrique Celis Yánez, dueño de Recy Investments, como reclamo por la colocación de aproximadamente 60 millones de pesos dominicanos en el Peravia. Celis Yánez había sido acusado por Jiménez Aray, de haber falsificado los certificados financieros que éste presentó para reclamar la suma. Estos casos son explicados en un reportaje del programa El Informe, transmitido por el canal 9 de República Dominicana.

Otra demanda fue la de la empresa New Asia Novelty Co. Limited, que demandó al Peravia por abuso de confianza reclamando la devolución de $ 2.000.000 que había colocado en la entidad financiera como depósito de un contrato de compra del Banco Micro S. A., en poder del Peravia, compra que no llegó a concretar. En diciembre de 2013, los abogados del Peravia pidieron una prórroga de 30 días para depositar su escrito de contestación, pero el 18 de febrero de 2014, el Consejo de Conciliación y Arbitraje de la Cámara de Comercio y Producción de Santo Domingo declaró en rebeldía a Peravia Group, por no haber participado en el proceso abierto en su contra, y ordenó el apoderamiento de un tribunal arbitral.

Curiosamente, en Venezuela, el ex concejal del municipio Libertador y editor del portal Primicias 24, Carlos Herrera, había alertado desde noviembre de 2012 a República Dominica sobre las posibles actividades de Santoro y Jiménez Aray. Herrera envió una carta a la embajadora dominicana en Venezuela, Adonaida Medina Rodríguez, en la que aseguraba que los dos ejecutivos estarían buscando convertir el territorio dominicano en un paraíso fiscal y de lavado de activos.

El 13 de diciembre de ese año, Herrera, asistido por el abogado Pedro Aranguren, entregó un documento a la Organización Nacional Antidrogas (ONA) en el que se señala la posibilidad real de que se estuviera utilizando la entidad financiera para el “lavado de dinero” proveniente del narcotráfico.

Las cosas comenzaron a ponerse difíciles al Peravia. En julio de 2014 su cartera de crédito era la más morosa del sector en República Dominicana, y registraban pérdidas por 117 millones de pesos.

Ya desde abril, la institución había sido sometida a un plan de regulación, aprobado por la Superintendencia de Bancos, debido a que presentaban debilidades. En octubre, el banco no pudo publicar sus estados financieros correspondientes al mes de septiembre.

El caso del Peravia causó impacto en Venezuela a principios de noviembre del presente año, a raíz de la denuncia por intento de secuestro que hizo el empresario venezolano Luis Ríos Virla, quien viajó a República Dominicana con el objeto de reclamar a los ejecutivos del Peravia la devolución de $ 2.500.000. Ríos Virla fue requerido, mientras se encontraba alojado en el Hotel Hollyday Inn, por un grupo de 14 personas armadas con una supuesta orden de arresto.

Entonces, Ríos Virla contactó a su abogado en República Dominicana, César Peralta, quien llegó al sitio junto a efectivos policiales que constataron que entre el grupo no había ni un solo funcionario policial, pero les encontraron una escopeta, dos navajas, una soga y una cinta adhesiva gris, justamente lo que es utilizado en casos de secuestro, cuenta Peralta.

El semanario 6to Poder publicó en su edición del 7 al 14 de noviembre, que Santoro y Jiménez Aray habían introducido una denuncia contra Ríos Virla, alegando que habían cancelado el monto adeudado en varias partes a través de bienes inmuebles y depósitos en efectivo.

Posterior a todos estos hechos, se conoció que Santoro abandonó República Dominicana con destino a Panamá en el vuelo 207 de la aerolínea Copa Airlines, el 24 de octubre. Jiménez Aray partió con destino a Atlanta, EE.UU., en el vuelo 324 de la aerolínea Delta Airlines el 20 de noviembre.

El seis de diciembre, la Procuraduría Antilavado y la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI) de República Dominicana apresaron a cinco personas, incluyendo a un policía, a quienes acusaron de integrar una red internacional de narcotráfico y lavado de activos a través del Banco Peravia. Los apresados son el agente policial Breznhev Jiménez Jiménez, acusado de ser el cabecilla del grupo; Víctor Manuel Ureña de la Rosa (alias Roto), Jorge Luis Rosario de la Cruz, Ángel Elpidio Pagán Merejo y el peruano Israel Geampierre Arrue.

Posteriormente, la Fiscalía del Distrito Nacional de República Dominicana informó que interrogaría a los ejecutivos del quebrado banco Peravia, que aún se encuentran en el país. “Ya la Fiscalía tiene localizable a los hermanos Nelson, Carlos y Jorge Serret Sugrañes, Luis Manuel Peña y Amín Raful”.

Vínculos con la corrupción venezolana

En diferentes medios de comunicación venezolanos y de República Dominicana se ha señalado que Santoro y Jiménez Aray tenían vínculos con el ex gobernador del estado Aragua y ex ministro de Finanzas, Rafael Isea, quien es requerido por las autoridades venezolanas acusado de corrupción. Jiménez Aray había sido secretario del Ministerio de Finanzas. Santoro, por su parte, integró la junta interventora de la Televisora Sindoni, compañía que pertenecía al empresario radicado en Maracay, Filippo Sindoni, asesinado en 2006. Durante el proceso de intervención se habrían conocido ambos personajes, debido a que Jiménez Aray fue abogado de la compañía televisiva.

Luego de la disolución del banco, se conoció que en agosto del presente año se había acusado al Peravia de desviar tres millones de dólares transferidos desde el Banco Central de Venezuela, según explicó el abogado Jorge Lara Castillo, abogado de la Corporación Kaya Armoring Blindado, y de Bertha Fernández, quienes demandaron al banco y sus ejecutivos.

Además de los casos de la empresa New Asia Novelty Co. Limited, Ríos Virla y de Bertha Fernández, otros venezolanos que han hecho reclamos al Peravia son Sol María Sthormes Bolívar y Juan Carlos Gómez Urdaneta, quienes reclaman $ 800.000 cada uno.

Fuente: José Luis Carrillo - 6topoder.com - 12/12/2014